domingo, 8 de enero de 2012

In memoriam: "Hiniesta de Sevilla" de Manuel Cabalgante Ortiz

El pasado día 1 de enero nos dejaba el joven compositor Manuel Cabalgante Ortiz (q.e.p.d.), subdirector de nuestra querida banda de música de la Sociedad Filarmónica “Nuestra Señora del Carmen” de Salteras (Sevilla) y en la seguridad de que ya se encuentra junto al Santísimo Cristo de la Buena Muerte y bajo la maternal mirada de la Virgen de la Hiniesta, Madre de Dios y Madre nuestra, hacemos este sentido homenaje a través de un estudio de su marcha procesional “Hiniesta de Sevilla”, compuesta en 2011 y estrenada el pasado Domingo de Ramos en la calle Trajano. D. Francisco Pizarro Gómez, director de la banda de música de la Sociedad Filarmónica “Nuestra Señora del Carmen” de Salteras (Sevilla), hace en nombre de toda la plantilla de esta señera y magnífica banda un homenaje a uno de los suyos, a un compañero, a un amigo y la Hermandad de la Hiniesta, como no podía ser de otra forma, pone a su disposición esta ventana abierta a los hermanos y seguidores de la Hermandad en la red. Manuel Cabalgante Ortiz, descanse en paz.


HINIESTA DE SEVILLA


Marcha de Procesión

Autor: Manuel Cabalgante Ortiz

Año de composición: 2011 


Dedicada a la Hermandad de la Hiniesta de Sevilla.


La única marcha que este autor le dedica a la Hermandad de la Hiniesta, para agradecer tanto a la misma como a su banda  “El Carmen de Salteras”, el apoyo y cariño mostrado durante su periodo de convalecencia.



ANÁLISIS ORGANOLÓGICO Y DE INSTRUMENTACIÓN



Una marcha hecha para plantilla de banda de música con cornetas. Observamos también la incorporación de los timbales en la percusión.



En la introducción, que se repite, observamos en la primera vez  los siguientes bloques tímbricos:



1.      Flautín, flautas, oboe, requinto, clarinetes, trompetas y fliscornos en la melodía principal. El timbal y la caja hacen el ritmo melódico.
2.      Fagot, clar. Bajo, barítono, trompa 2ª y 3ª, trombón, bombardino y tuba con el ritmo y base armónica.
3.      Alto, tenor, trompa 1ª como contrapunto melódico.



Cuando se repite por segunda vez lo hace igual pero incorporando a las cornetas, haciendo una llamada como contrapunto segundo a la melodía.



 En el primer tema, aparecen los siguientes bloques tímbricos:



1.      Clarinetes exponiendo la melodía.

2.      Flautas y oboes haciendo contrapunto melódico.

3.      Fagott, tuba, trombones y trompas haciendo ritmo y base armónica.

4.      Trompas y altos rematan el contrapunto armónico.



Antes de repetir este tema A  desarrolla un puente donde utiliza la siguiente instrumentación en piano:



1.      Clarinetes y fliscornos.

2.      Altos y trompas en contrapunto

3.      Resto acompañamiento armónico y ritmo.



 Cuando retoma el tema A en fuerte aparecen los siguientes timbres:



1.      Flautín, flauta, oboe, requinto, clarinetes,trompetas y fliscornos en la melodía.

2.      Altos, tenores, trompas, y bombardino en el contrapunto.

3.      Cornetas haciendo una llamada.

4.      Resto base y ritmo armónico.



 Aparece el tema B o fuerte-bajo donde utiliza:



1.      Fagott, clar. Bajo, tenor, barítono,trompas, trombones y tubas en la melodía.

2.      Clarinetes con ritmo percusivo.

3.      Trompetas y fliscornos en llamadas contrapuntísticas.



 Después vuelve a aparecer el tema A en fuerte en las mismas condiciones anteriores y da paso al tema C.



  En el tema C  en piano, emplea la siguiente combinación instrumental:



1.      Clarinetes y fliscornos en melodía principal.

2.      Oboe, flautas y altos alternando en contrapunto.

3.      Resto base armónica y ritmo.



 Cuando retoma el tema C en medio fuerte utiliza:


1.      Flauta, oboe, requinto y clarinetes. El fliscorno se incorpora 4 compases después para hacer un “crescendo” natural.

2.      Altos, tenores y trompas en contrapunto.

3.      Resto, acompañamiento armónico y ritmo.



Y cuando llega el fuerte de este tema utiliza además de los anteriores:



1.      Flautín  y trompetas en la melodía principal.

2.      Bombardino en el contrapunto.

3.      Resto sigue igual.


 De esta manera consigue darle más intensidad a la música,  sin necesidad de ir aumentando la fuerza en los intérpretes.





ANÁLISIS MELÓDICO-FORMAL



La introducción que se repite dos veces al principio, la plantea en ocho compases. La melodía principal es quebrada, con una combinación de corchea con puntillo, tresillos de semicorchea y tresillos de negras. El contrapunto melódico es de figuración más lenta utilizando la blanca, negra y corchea. La otra melodía que surge en las cornetas cuando repite, es una llamada de tresillos de corcheas y negras en general.



 En el tema A de 24 compases subdividido en frases de 8 (A,A´,A),la melodía se presenta mucho más sosegada o tranquila, con una figuración en general de negras con algunas blancas y corcheas. Es una melodía ondulante el tema principal. La melodía del contrapunto es similar en ritmo, con una figuración lenta.



Cuando repite el tema A por tercera vez, le imprime más ritmo a través del contrapunto, donde ya utiliza el tresillo de corcheas combinándolo con la corchea.



En el tema B de 8 compases, vuelve a recordar el “croché” rítmico de la introducción (corchea con puntillo blanca y tresillos de corcheas), pero en este caso en los metales, mientras los clarinetes llevan un ritmo percusivo constante con la figuración de corchea. Esta melodía es contestada con ritmo similar en las trompetas en forma de canon.



 Vuelve a repetir el tema en fuerte y da paso al tema C. El tema C cuyo tema principal tiene 24 compases subdivididos en frases de 8 es también una melodía tranquila con una combinación de negras y tresillos de corcheas, cuya intensidad va en un “crescendo” permanente. Cuando repite este tema lo hace con algunas variaciones y acortando la última frase, por lo que tan solo repite 16 compases del mismo.





ANÁLISIS ARMÓNICO



La marcha comienza con un Do mixolidio (tonalidad poco común en la música cofrade y más usual en el jazz-fusión). 


Podemos comprobar como va jugando con los diferentes grados de este modo buscando siempre la tónica como punto de apoyo.

 A continuación realiza un puente  con el final del fraseo de la introducción, hacia un Do Dórico, creando un ambiente medieval muy curioso. Otra tonalidad poco común en este tipo de música.








El ambiente que genera en el tema A con el modo Dórico es propio de una balada medieval de Guillaumet de Machaut.








 Hace algún movimiento de enfatización al final del tema, pero vuelve a la modalidad dórica.






Observamos en el fragmento anterior como va utilizando cadencias hasta desembocar nuevamente en Do dórico.Cuando suelta el tema A en modo Dórico enlaza con el tema B de forma repentina en Do Frigio.





Cabalgante consigue cambiar de carácter musical utilizando la tónica Do en todo momento hasta aquí, pero cambiando la modalidad a mixolidio, dórico y frigio.

Vuelve a repetir la introducción pasando al modo de Do mixolidio nuevamente, y pone de manifiesto su intención oculta de utilizar esta tónica durante toda la pieza para anunciar una variable dominante de FaM. Tonalidad en la que desemboca en el último tema o trío.

El trío o tema C se escribe en un FaM poco estable, jugando con las enfatizaciones permanentemente sin que en ningún momento genere tensión en la melodía sosegada que plantea en este tema. Es como si la propia armonía en sí, fuera un contrapunto de carácter a la melodía.

Observamos el principio del tema:    

 

    













La melodía (escrita para instrumentos en Sib), se observa tranquila, serena o reposada, sin alteraciones accidentales y dentro de la tonalidad de Fa. Sin embargo, si nos fijamos en la armonía, vemos como a partir del 2º compás amaga con enfatizar en Rem, pero no lo hace ya que después resuelve en Sol m, como observamos en el siguiente fragmento:






Una vez aquí, va alternando la nueva tonalidad con la inicial (FaM) hasta terminar la exposición temática.



ANÁLISIS ESTÉTICO



Una pieza que sin lugar a dudas reclama un lugar privilegiado, no ya dentro del Patrimonio Musical de la Hiniesta sino en el mundo cofrade en general.

Cabalgante es capaz de crear distintas atmósferas con una misma tónica. Sin salir de Do, genera un ambiente actual y fresco en el modo mixolidio, otro más medieval con el dórico, y un último aflamencado con el frigio.

De esta manera, Cabalgante nos da un paseo retrospectivo desde la más nueva actualidad hasta nuestros orígenes musicales sin aspavientos, con absoluta normalidad, haciendo de lo difícil algo natural y fácil, poniendo de manifiesto una personalidad tan inteligente como humilde.

El estilo del Trío es más clásico, pero sin caer en una armonía simplona. Todo lo contrario, pone de manifiesto una inestable tonalidad sin que perjudique en ningún momento la dulce melodía.

Sin lugar a dudas, una obra con estilo y personalidad propia, digna de un lugar privilegiado en el mundo de la música cofrade.



Francisco Pizarro Gómez
Director de la Banda de Música de la Sociedad Filarmónica
"Nuestra Señora del Carmen" de Salteras (Sevilla).





No hay comentarios: