jueves, 30 de agosto de 2012

Preparación de la Tómbola Benéfica y Velá Virgen de la Hiniesta 2012


Como ya se anunció a través de este medio, este año la tradicional tómbola benéfica se celebrará los días 21, 22 y 23 de septiembre. En este tiempo ya han comenzado a realizarse todos los preparativos de este evento que se ha convertido en una tradición en nuestro barrio se San Julián y que sirve de punto de encuentro y convivencia a hermanos y vecinos. 

La Diputación de Obras Asistenciales, como cada año, hace un llamamiento a la colaboración de todos los hermanos en esta actividad destinada a obtener beneficios para ayudar a los más necesitados. 

Hoy día 30 de agosto a las 21:00 en nuestra casa de hermandad se celebrará una reunión para comenzar a concretar todos los preparativos. Todas las personas que estén interesadas en colaborar con la organización, ya sea participando en los distintos equipos de trabajo (barra, cocina, tómbola), como aportando regalos, están invitadas a participar en esta reunión o a ponerse en contacto con la Diputación de Obras Asistenciales a través del correo electrónico:

obrasasistenciales@hermandaddelahiniesta.es

miércoles, 29 de agosto de 2012

Conoce tu Hermandad (IV): La leyenda de la aparición de la Hiniesta Gloriosa


Azulejo conmemorativo de la llegada
de la Virgen al Templo de San Julián
Cuenta la leyenda que, a finales del siglo XIV, el caballero catalán Mosén Per de Tous se encontraba cazando en los montes de su tierra cuando su azor quedó paralizado ante las retamas en las que se había refugiado la perdiz que perseguía. Extrañado por el comportamiento del animal, el caballero se apeó de su caballo, miró dentro del matorral y descubrió una imagen de la Virgen con el Niño en brazos, con una inscripción a sus pies que, en latín, decía: "Soy de Sevilla, de una capilla junto a la puerta que encamina a Córdoba". El hecho de haberse encontrado la imagen de la Virgen oculta en unas retamas o hiniestas motivó que se titulase Santa María de la Hiniesta.

Tras el hallazgo, en torno a 1380, Per de Tous habilitó un carro, adornado con costosos y ricos terciopelos y tirado por dos bueyes para trasladar la imagen, a la que acompañó junto a sus parientes y criados. 

En el cortijo de Cuartos, a las afueras de Sevilla, salieron a recibir a la comitiva el arzobispo y los cabildos eclesiástico y secular, e, incluso, los reyes Juan I y Leonor de Aragón, que se encontraban en Sevilla. La Virgen fue conducida a la catedral, donde se celebró octava y fiesta. 

El cabildo catedralicio quiso quedarse con la imagen, pero Per de Tous hizo prevalecer su voluntad de conducirla al lugar que indicaba la inscripción: la parroquia de San Julián, por ser el templo en aquel entonces más próximo a la puerta abierta en las murallas de la ciudad que conducía a Córdoba.

La puerta por la que entró la imagen en la iglesia, en la nave del Evangelio, se tapió como señal del deseo divino de permanencia en el templo y en la ciudad, y así continúa en nuestros días.

Años mas tarde, en 1407, Per de Tous construyó una capilla en la cabecera de la nave del Evangelio donde entronizó a la Virgen de la Hiniesta.

Arranca así la devoción a la Virgen que durante siglos será la protectora y patrona de la ciudad de Sevilla.

sábado, 25 de agosto de 2012

Monumento a Juan Pablo II en Sevilla


El pasado 14  de Agosto, víspera de la festividad de la Asunción de la Virgen María, a la finalización del Triduo a la Virgen de los Reyes se bendijo por parte de nuestro Arzobispo, D. Juan José Asenjo, el monumento al Beato Juan Pablo II. 

Está situado en la Plaza Virgen de los Reyes, a las puertas de la Iglesia Conventual de la Encarnación de las MM Agustinas. Es una obra en bronce realizada por el catedrático de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla, escultor e imaginero, Juan Manuel Miñarro López. Cuenta con una altura de 2.45 metros y representa al Papa Juan Pablo II con los brazos abiertos, vestido con la  casulla que usó en la beatificación de Sor Ángela de la Cruz en 1982, y portando el báculo.

Recordemos que Juan Pablo II fue Papa de la Iglesia Católica durante 27 años, desde Octubre de 1978 hasta su muerte en 2005. A lo largo de su fructífero pontificado destacó por su especial devoción a la Virgen María como Madre y mediadora ante Jesucristo. Igualmente, fue artífice de la Nueva Evangelización y promovió la doctrina social de la Iglesia a través de encíclicas y documentos.

Desarrolló una intensa actividad misionera, dejando una huella imborrable en aquellos lugares que visitó. Realizó 104 viajes, peregrinando por 129 países distintos. Entre ellos estuvo en España en cinco ocasiones y concretamente dos veces en Sevilla, en 1982 y en 1993.

De grato recuerdo resulta la primera de las visitas apostólicas realizadas a nuestra Capital, en la que el 5 de Noviembre beatificó a Santa Ángela de la Cruz. Posteriormente en 1993, el sábado 12 de junio, llegó directamente desde el Vaticano al Aeropuerto de San Pablo para la Clausura del 45 Congreso Eucarístico Internacional, dentro de los actos conmemorativos del V Centenario del descubrimiento y evangelización de América.

Con este monumento Sevilla rinde un merecido homenaje a Juan Pablo II, el Papa Peregrino elevado a Beato el 1 de Mayo de 2.011, destacado por su compromiso ético y moral, por su lucha a favor de la justicia social, y abogando en todo momento por la mejora de las condiciones de vida en los países más pobres del mundo. De esta manera permanecerá en nuestra tierra el recuerdo imborrable  del  Papa que pernoctó en Sevilla, que rezó el ángelus a los pies de la Giralda y que fue despedido por sevillanas como muestra de cariño de nuestro pueblo.  

jueves, 23 de agosto de 2012

Montaje de Triduo, Función Votiva y Besamanos Extraordinario


Tras un mes de agosto con bastante actividad en todos y cada uno de los distintos ámbitos de la junta de gobierno, el próximo lunes 27 de agosto la priostía de nuestra hermandad comienza el montaje de los próximos cultos a celebrar en el mes de septiembre.

Rogamos a todos nuestros hermanos interesados en colaborar con el montaje de dichos cultos, que asistan a nuestra casa de hermandad a partir de dicha fecha, ya que este año al  Triduo de septiembre y a la tradicional Función Votiva del día 8 de septiembre en honor de nuestra Virgen Gloriosa hay que sumar el montaje del Besamanos extraordinario a nuestra Virgen Dolorosa, con motivo del 75 aniversario de su bendición, los días 5 y 6.

Todas las tardes a partir de las siete y media nos podréis encontrar en la casa de hermandad ocupados en los preparativos de dichos cultos. Os esperamos a todos con los brazos abiertos.

miércoles, 15 de agosto de 2012

Asunción de Nuestra Señora



Solemnidad de la Asunción de la bienaventurada Virgen María, Madre de nuestro Dios y Señor Jesucristo que, acabado el curso de su vida en la tierra, fue elevada en cuerpo y alma a la gloria de los cielos. Esta verdad de fe, recibida de la tradición de la Iglesia, fue definida solemnemente por el papa Pío XII en 1950. Un ángel se aparecía a la Virgen y le entregaba la palma diciendo: 'María, levántate, te traigo esta rama de un árbol del paraíso, para que cuando mueras la lleven delante de tu cuerpo, porque vengo a anunciarte que tu Hijo te aguarda'. María tomó la palma, que brillaba como el lucero matutino, y el ángel desapareció. Esta salutación angélica, eco de la de Nazaret, fue el preludio del gran acontecimiento.

Poco después, los Apóstoles, que sembraban la semilla evangélica por todas las partes del mundo, se sintieron arrastrados por una fuerza misteriosa que les llevaba a Jerusalén en medio del silencio de la noche. Sin saber cómo, se encontraron reunidos en torno de aquel lecho, hecho con efluvios de altar, en que la Madre de su Maestro aguardaba la venida de la muerte. En sus burdas túnicas blanqueaba todavía, como plata desecha, el polvo de los caminos: en sus arrugadas frentes brillaba como un nimbo la gloria del apostolado. Se oyó de repente un trueno fragoroso; al mismo tiempo, la habitación de llenó de perfumes, y Cristo apareció en ella con un cortejo de serafines vestidos de dalmáticas de fuego.

Arriba, los coros angélicos cantaban dulces melodías; abajo, el Hijo decía a su Madre: 'Ven, escogida mía, yo te colocaré sobre un trono resplandeciente, porque he deseado tu belleza'. Y María respondió: 'Mi alma engrandece al Señor'. Al mismo tiempo, su espíritu se desprendía de la tierra y Cristo desaparecía con él entre nubes luminosas, espirales de incienso y misteriosas armonías. El corazón que no sabía de pecado, había cesado de latir; pero un halo divino iluminaba la carne nunca manchada. Por las venas no corría la sangre, sino luz que fulguraba como a través de un cristal.

Después del primer estupor, se levantó Pedro y dijo a sus compañeros: 'Obrad, hermanos, con amorosa diligencia; tomad ese cuerpo, más puro que el sol de la madrugada; fuera de la ciudad encontraréis un sepulcro nuevo. Velad junto al monumento hasta que veáis cosas prodigiosas'. Se formó un cortejo. Las vírgenes iniciaron el desfile; tras ellas iban los Apóstoles salmodiando con antorchas en las manos, y en medio caminaba san Juan, llevando la palma simbólica. Coros de ángeles agitaban sus alas sobre la comitiva, y del Cielo bajaba una voz que decía: 'No te abandonaré, margarita mía, no te abandonaré; porque fuiste templo del Espíritu Santo y habitación del Inefable'.

Acudieron los judíos con intención de arrebatar los sagrados despojos. Todos quedaron ciegos repentinamente, y uno de ellos, el príncipe de los sacerdotes, recobró la vista al pronunciar estas palabras: 'Creo que María es el templo de Dios'.

Al tercer día, los Apóstoles que velaban en torno al sepulcro oyeron una voz muy conocida, que repetía las antiguas palabras del Cenáculo: 'La paz sea con vosotros'. Era Jesús, que venía a llevarse el cuerpo de su Madre. Temblando de amor y de respeto, el Arcángel San Miguel lo arrebató del sepulcro, y, unido al alma para siempre, fue dulcemente colocado en una carroza de luz y transportado a las alturas. En este momento aparece Tomás sudoroso y jadeante.

Siempre llega tarde; pero esta vez tiene una buena excusa: viene de la India lejana. Interroga y escudriña; es inútil, en el sepulcro sólo quedan aromas de jazmines y azahares. En los aires una estela luminosa, que se extingue lentamente, y algo que parece moverse y que se acerca lentamente hasta caer junto a los pies del Apóstol. Es el cinturón que le
envía la virgen en señal de despedida.

Esta bella leyenda iluminó en otros siglos la vida de los cristianos con soberanas claridades. 

Nunca la Iglesia quiso incorporarla a sus libros litúrgicos, pero la dejó correr libremente para edificación de los fieles. Penetró en todos los países, iluminó a los artistas e inspiró a los poetas. Parece que resurgió, una vez más, en el valle de Josafat, allá donde los cruzados encontraron el sepulcro en el que se habían obrado tantas maravillas y sobre el cual suspendieron tantas lámparas. Como la piedad popular quiere saber, pidiendo certezas y realidades, la leyenda dorada aparece con los rasgos con que el oriental sabe tejerlos entre el perfume del incienso y azahares, adornada con estallidos y decorada con ángeles y pompas del Cielo. Se difunde en el siglo V en Oriente con el nombre de un discípulo de San Juan, Melitón de Sardes, Gregorio de Tours la pasa a las Galias, los españoles la leen en el fervor de la reconquista con peregrinos detalles y toda la Cristiandad busca en ella durante la Edad Media alimento de fe y entusiasmo religioso.

Ni fecha, ni lugar. ¿Cómo fue el prodigio? Escudriñando la Tradición hay un velo impenetrable. San Agustín dice que pasó por la muerte, pero no se quedó en ella. Los Orientales gustan de llamarla Dormición con ánimo de afirmar la diferencia. ¿Tránsito? Separación inefable. Ni el Areopagita, ni Epifanio, ni Dante acertaron a describir lo real indescriptible, inefable: el último eslabón de la cadena que se inicia con la Inmaculada Concepción y, despertando secretos armónicos, apostilla la Asunción con la Coronación que el arte de Fra Angélico se atreve a plasmar con pasta conservada en el Louvre. La Iglesia celebra, junto al Resucitado Hijo triunfante, a la Madre, singularmente redimida, Glorificada desde la Traslación.

lunes, 13 de agosto de 2012

Conoce tu hermandad (III): La sede

Colocación de la primera piedra de la antigua casa hermandad

En 1412 se funda la hermandad de la Hiniesta, pero no es hasta 1480 cuando adquiere terrenos propios, en concreto unas casas a espaldas de la parroquia de San Marcos donadas en su testamento por el clérigo Luís Alfonso. Ahí se crearía un hospital.

En 1584 el Ayuntamiento cede unos terrenos a la hermandad para construir capilla propia en San Julián. Tres años más tarde, en 1587, se clausura el hospital y la hermandad se traslada a la capilla ubicada en la nave del Evangelio de la parroquia(la nave más cercana al despacho parroquial y la casa hermandad).

En 1635 la parroquia llega a un acuerdo con Francisco de Monsalve para que construya un retablo mayor para la Virgen de la Hiniesta Gloriosa en el presbiterio. Dicho retablo será construido por Felipe de Ribas y finalizado en 1674.

El 8 de Abril de 1932 la parroquia de San Julián es incendiada, perdiéndose el citado retablo junto con las imágenes titulares que recibían culto en él. La hermandad se traslada a la vecina iglesia de San Marcos.

En 1935 la cofradía sale desde Santa Marina, con crucificado cedido por la hermandad de la Lanzada y como dolorosa bajo palio la Virgen de la Hiniesta obra de Antonio Castillo Lastrucci que se perdió en el incendio de San Marcos en 1936.

Tras el incendio del 18 de Julio de 1936, la hermandad se traslada a la iglesia de San Luis de los Franceses (Calle San Luis)

En 1938-39, y dadas las dimensiones de la iglesia de San Luis de los Franceses, la cofradía sale desde la iglesia de Los Terceros, ya con las actuales imágenes. Al año siguiente, 1940, se realiza estación de penitencia desde la iglesia de Montesión y los posteriores (1941-45) la cofradía sale de la iglesia de San Martín.

En 1946 se reabre al culto la parroquia de San Julián. Se abandona así la sede provisional de San Luis de los Franceses.

El 8 de diciembre de 1964, se pone la primera piedra de la Casa de Hermandad, anexa a la parroquia de San Julián. El Cardenal Bueno Monreal la bendice en 1966 y es una de las primeras que existen en Sevilla.

El 17 de Julio de 1989 se cierra S. Julián, trasladándose la hermandad a la iglesia de San Hermenegildo (frente a gasolinera de Capuchinos) y realizando las estaciones de penitencia de los años 1990-94 desde la iglesia de Santa Marina, exceptuando 1993 que sale de San Julián a pesar de estar aun en obras.

El 16 de Septiembre de 1994 se reabre al culto San Julián, y desde 1995 se realiza la estación de penitencia desde dicha parroquia.

En 2006 se derriba la antigua casa hermandad, y se comienza la construcción de una nueva que se bendice en Enero de 2010.

¿Sabías que….una real cédula de 1662 concedió licencia a la Hermandad de la Hiniesta para pedir limosna en América durante cinco años con el fin de concluir el retablo mayor de San Julián para la Virgen de la Hiniesta Gloriosa?