Despedida a Juan Martínez Alcalde

En la hora de tu ausencia, resulta extraño hablar con tu hermana y no verte a su lado. Resulta extraño no recibir tu cálido saludo, no oír tu palabra amable.

Con la pérdida de Juan Martínez Alcalde se nos marcha un sevillano en ejercicio con estilo propio, de los que con su sola presencia irradiaba confianza y generosidad. Persona culta, cofrade erudito y de maneras exquisitas. Su finura sobrepasaba su apariencia física porque era su forma de ser. Juan Martínez Alcalde ha sido el gran promotor de las glorias marianas de Sevilla. En unos tiempos complicados, Juan ha sido el depositario de advocaciones y ritos. En la autodenominada tierra de María Santísima, este hombre de figura grácil y espíritu inmenso abarcaba el rosario devocional letífico de la ciudad.

La Santísima Virgen ha sido el auténtico leitmotiv de su vida. Su amor por la Madre de Dios ha sido el estímulo permanente y la razón de su existencia. Y buen ejemplo de ello ha sido la entrega sin límites con la Hiniesta. Juan Martínez Alcalde impulsó la Coronación Canónica de nuestra amantísima titular de gloria, y ese empeño le valió ser su cronista tanto en la coronación, como en el DC aniversario de la fundación de la hermandad de luz de la Virgen de la Hiniesta Gloriosa.

Desde lo alto Juan disfruta ya de la presencia eterna de la Madre de Dios, quien lo tendrá recogido en su regazo como uno de sus hijos más queridos, en justa correspondencia al amor que Juan le profesaba. Descansa en la paz de Dios para siempre y cuida desde lo más alto para que en Sevilla y sus tradiciones marianas más profundas encuentren dignos herederos de tu paso por esta bendita tierra.

Gracias Juan Martínez Alcalde por tu trato personal, por tu entrega a Sevilla y sus cofradías y, en nombre de toda la Hermandad, por todo lo que hiciste por la Hiniesta Gloriosa. De todo corazón, GRACIAS.

José Antonio Romero Pérez

Hermano Mayor