lunes, 18 de febrero de 2013

Besamanos a María Santísima de la Hiniesta Dolorosa



 Durante el sábado 16 y domingo 17 de febrero, primer fin de semana decuaresma se celebró tal y como prescriben nuestras reglas, solemne y devotobesamanos a nuestra titular dolorosa, la Santísima Virgen de la Hiniesta.

El presbiterio alto y bajo, junto con el altar mayor de la parroquia de San Julián aparecían cubiertos con cortinas rojas dedamasco. Dichas cortinas centrales estaban rematadas por molduras doradas entodo su perímetro y crestería dorada tallada en el centro.

Al pie del presbiterio alto se ubicaba un impresionante dosel compuestopor nuestros respiraderos antiguos, adquiridos a la Hermandad de la Amargura, sobre un podio conformado porlos  respiraderos anteriores a losactuales, de orfebrería y malla bordada. Sobre éste y ante el dosel, dos candelabros del paso de nuestra titulargloriosa, portando cera y centros flores flanqueaban el gloria antiguo denuestro paso de palio. Terciadas en torno al gloria y sobre el dosel aparecíandistribuidas cuatro banderas de nuestra cofradía. Se remataba el conjunto conuna corona real de orfebrería y caídas con crestería de orfebrería y cordonesantiguos de plata, de nuestro paso de palio. Desde el techo de la nave centraly sobre el dosel, bajando de unos cordones de terciopelo aparecían treslámparas doradas iluminadas.

En los balcones del presbiterio, revestidos con paños realizados por lashermanas del ropero, se ubicaban dos pequeños doseles con una muestra del ajuarde plata de nuestra dolorosa, iluminados cada uno por la cera de una pareja denuestras marías de tres luces cada una. Friso de flores blancas remataba cadabalcón, así como desde las lámparas colgaban dos centros de flores en cadabalcón, iluminándose el resto de lámparas con velones rojos.

Una pequeña balaustrada o pasamanos aparecía en los escalones delprebistério uniendo el alto y el bajo, realizada con candelería de nuestro pasode palio, las perillas del mismo y cordones de seda rojos. El altar fijo denuestra parroquia aparecía cubierto con el paño de altar estrenadorecientemente en el quinario.

Ante el presbiterio bajo, muy cerca y accesible para sus hermanos ydevotos y sobre peana dorada se nos presentaba nuestra bendita madre dolorosa vestida de reina, con su manto de salida bordado por NHD. Juan ManuelRodríguez Ojeda y saya blanca bordada en oro, del taller de Santa Sárbara.

La virgen, bellísima con ocasión de su besamanos, aparecía rodeada porlas seis columnas de cultos de nuestra hermandad, cuatro de ellas con centros deflores. Las que se ubicaban tras la virgen portaban dos marias de cinco lucescada una. Desde el presbiterio alto, hasta las primeras columnas de nuestraparroquia, nuestra priostía enmoquetó el suelo de rojo, y colocó bajo la peana de nuestra Virgen una alfombra burdeos y oro.  Tras el conjunto citado, a ambos lados delmismo, aparecían dispuestas las credencias doradass de nuestra parroquia con ellibro de reglas, niño Jesús vestido de nazareno, sacras y porta-pacesiluminados por una parejas de candeleros con cera blanca.  Y ante todo ello, seis blandones dorados concera blanca.

Las flores que esta ocasión ha lucido nuestra dolorosa han sido calas,alelíes y estatis.

La junta de gobierno de nuestra hermandad en general y la priostía enparticular quisieran agradecer a los muchos hermanos que han colaborado en elmontaje del besamanos su dedicación, trabajo y esfuerzo. Sin ellosprobablemente no se habría realizado este montaje, que tanto ha gustado yque tantos elogios ha recibido, tanto por nuestros hermanos como por loscofrades que han tenido la oportunidad de contemplarlo. Muchísimas gracias ennombre de la hermandad y que la Santísima Virgen os lo premie.

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