El pasado 31 de enero, justo hace una semana, la Hermandad de la Hiniesta vivía una de las jornadas más importantes de su vida, ya que veía cumplido uno de sus anhelos más acuciantes, la bendición de su nueva Casa de Hermandad. Una sede social donde en más de mil metros cuadrados poder desarrollar sus fines como colectivo de hermanos, como Hermandad. Muchos fueron los preparativos de última hora para que todo estuviera en perfecto estado, así muchos hermanos han trabajado y colaborado para que el sueño se hiciera realidad. El grupo de mujeres, la juventud, la priostía y muchos hermanos han participado de una forma u otra para ver terminada su Casa de Hermandad. En las vísperas de la bendición un grupo de hermanos hasta altas horas de la madrugada se afanaban para dejar las instalaciones en perfecto estado, mientras los priostes con su equipo finalizaban el hermoso altar de cultos para la Función y Besapies del Santísimo Cristo de la Buena Muerte.
Minutos antes de las doce del mediodía llegaba a nuestra parroquia de San Julián, el Excmo. y Rvdmo. Sr. Arzobispo de Sevilla, Monseñor Juan José Asenjo Pelegrina, que fue recibido como corresponde en estos casos por nuestro Párroco y Director Espiritual, Rvdo. Sr. D. Juan Manuel Cazorla Baena y por nuestro Hermano Mayor, Francisco Granados Gómez. El señor párroco ofreció a Monseñor Asenjo el hisopo dentro del acetre, para que como marca el rito de recepción para los obispos, se aspergiera y fue acompañado hasta la capilla sacramental por la comitiva, a la que se unió el Presidente del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla, nuestro hermano Adolfo Arenas Castillo, recorriendo toda la nave central del templo con todos los asistentes en pie, en señal de respeto hacia el señor Arzobispo. Durante unos minutos y ante la Santísima Virgen de la Hiniesta Gloriosa Coronada, que se encontraba en la capilla del Santísimo Sacramento estuvo rezando nuestro Arzobispo. En el presbiterio alto de la capilla mayor de San Julián, lucía esplendoroso el Santísimo Cristo de la Buena Muerte, bajo su dosel de cultos y rodeado de jarras de lirios que exornaban el conjunto.
Fueron muchos los invitados y autoridades que quisieron acompañarnos en un día tan importante, así el Excelentísimo Ayuntamiento de Sevilla, con el señor alcalde y la Delegada de Fiestas Mayores; el Consejo General de Hermandades y Cofradías, con su presidente y delegados de gloria y sacramentales; la Orden de San Clemente, el Colegio de Médicos, el Círculo Mercantil e Industrial y un nutrido número de hermanos mayores formaron parte de los invitados. Concelebraron con el señor Arzobispo nuestro párroco de San Julián, Rvdo. Sr. D. Juan Manuel Cazorla Baena y el Secretario Particular del Arzobispo, Rvdo. Sr. D. Bernado López Díez. Nuestro Arzobispo nos deleitó con una hermosa Función en honor del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, donde además de la Bendición Solemne final tuvo a bien bendecirnos con el Evangelio tras la lectura de la palabra de Dios.En su homilía tuvo palabras de alegría por encontrarse entre nosotros y nos pidió compromiso y hondura en nuestros corazones.Nos recordó así mismo la importancia que tienen los seglares en la evangelización y que no nos dé miedo, ni vergüenza hablar del Señor a nuestros hermanos, mostrándoles a Jesucristo como Salvador único... aprovechando todos los ambientes y circunstancias en que se entreteje nuestra vida: la familia, el trabajo, la profesión, las relaciones sociales e incluso los lugares de diversión y de esparcimiento.Nos recordó unas palabras del Papa Pablo VI que decía que la fe se robustece dándola.Todas sus palabras durante la homilía fueron reconfortantes para los hermanos de la Hiniesta, la feligresía de la parroquia de San Julián y los presentes. Finalizada la Función Monseñor Asenjo se hizo una fotografía con la Junta de Gobierno en recuerdo del acontecimiento, pasando posteriormente a la Casa de Hermandad, donde le esperaba el señor alcalde.
La bendición tuvo lugar en el primer tramo del salón de hermanos de la planta baja. En el rito de la bendición participaron los sacerdotes que concelebraron la Función y nuestro Pastor Diocesano nos instó para que fuera realmente un foro de Hermandad y bienestar para todos los hermanos. Tras la bendición sonaron los compases de la marcha "La Estrella Sublime" entre aplausos de todos los presentes que emocionados vieron como ya era una realidad la nueva Casa de Hermandad. Posteriormente pasaron al patio principal, donde se descubrió un azulejo conmemorativo del evento realizado por Isabel Parente. El señor Alcalde junto con el Arzobispo fueron los encargados de descubrirlo.
Unas palabras de nuestro Hermano Mayor, Francisco Granado Gómez, dándole en primer lugar el pésame al señor Arzobispo por la reciente muerte de su madre y comentando la alegría inmensa del acontecimiento que celebrábamos, así como una invitación a los hermanos para que disfrutaran de su casa, dieron paso al señor Alcalde que incidió sobre la importancia de los restos arqueológicos encontrados tras las obras de la nueva casa y reconoció que son dignos de ser patrocinados por Turismo de Sevilla.
A continuación se pasó a realizar un circuito guiado para autoridades e invitados, mientras los hermanos pudieron disfrutar de un ágape servido por nuestras hermanas y hermanos que se prestaron a colaborar en este acto. Todos los invitados durante el recorrido por la Casa de Hermandad destacaban la amplitud, luminosidad y belleza de los nuevos espacios, destacando la sala de exposición, que fue elogiada por los presentes. Fueron también muchos los medios de comunicación que cubrieron el acto, ya sea televisión, radio, prensa o digitales.
Durante el recorrido, tanto el señor Alcalde como el señor Arzobispo se interesaron por numerosas cuestiones de las distintas dependencias, como el salón de la planta alta donde ensaya nuestra Coral Polifónica "Virgen de la Hiniesta", que fue felicitada por Monseñor Asenjo, o en el sótano por las pinturas murales. En el salón de exposición, firmaron en el libro de honor de la Hermandad y en el acta extraordinaria realizada para conmemorar el acontecimiento, el señor Alcalde y el señor Arzobispo de Sevilla, dejando unas dedicatorias entrañables.
A la finalización del recorrido de las autoridades e invitados se dio paso al resto de hermanos para que pudieran visitar su casa y en la mesa donde firmaron los invitados se dejó un anexo al acta anteriormente citada para que todos aquellos hermanos que quisieran dejar constancia de su presencia en este acto de bendición, lo hicieran por escrito. Durante todo el resto de la tarde una notable afluencia de hermanos y de cofrades se dieron cita en San Julián, para asistir al Besapies del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y admirar las nuevas instalaciones de la Hermandad. Sensible con la tragedia de Haití y siguiendo las directrices del Consejo General de Hermandades y Cofradías, la Diputación de Obras Asistenciales aprovechó la ocasión para recaudar fondos que sirvan para paliar a los más desfavorecidos de este luctuoso suceso en ese país.
Una jornada histórica para todos los hermanos de la Hiniesta, para la Hermandad. Tras varios años sin un lugar de encuentro y reunión, los hermanos volvemos a tener una Casa de Hermandad, donde desarrollar nuestros fines: culto, caridad y formación. Una casa abierta, de todos y para todos y que también se abre a nuestra parroquia y nuestro barrio para atender las necesidades que requieran. Los hermanos de la Hiniesta estamos de enhorabuena por contar con un lugar donde disfrutar de nuestra Hermandad.
Agradecemos la colaboración de Arte Sacro, que ha aportado el reportaje fotográfico.
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