Comienza un nuevo año litúrgico preparando la llegada del Señor. Jesús nace de nuevo en nuestras vidas y en nuestros corazones. Es por tanto un tiempo de una profunda espiritualidad que nos invita a prepararnos para recibir a Jesucristo limpiando y allanado los caminos del alma y que requiere un cambio interior para acogerlo con un corazón limpio.
Es un periodo de encuentro del hombre con Cristo que viene acompañado por las buenas obras, por el amor al prójimo y por la caridad y de esa manera descubrir el valor de los bienes eternos y vivirlos con responsabilidad.
Nuestro Arzobispo D. Juan José Asenjo nos recuerda este domingo que “El mejor modelo del adviento es la Stma. Virgen, que acogió a su Hijo, primero en su corazón y luego en su seno, lo esperó con inefable amor de Madre y preparó intensamente su corazón para Comienza un nuevo año litúrgico preparando la llegada del Señor. Jesús nace de nuevo en nuestras vidas y en nuestros corazones. Es por tanto un tiempo de una profunda espiritualidad que nos invita a prepararnos para recibir a Jesucristo limpiando y allanado los caminos del alma y que requiere un cambio interior para acogerlo con un corazón limpio.
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