El pasado sábado 6 de noviembre el grupo de Mujeres del Ropero de la Santísima Virgen de la Hiniesta, organizó una convivencia abierta para todos los hermanos con el noble fin de la restauración de una pieza importante de nuestro patrimonio artístico, como son los faldones blancos de damasco bordados en oro y sedas de colores, que realizara el taller de José Manuel Elena en 1999 para el paso procesional de la Santísima Virgen de la Hiniesta Gloriosa Coronada.
La gran asistencia de hermanos que se dio cita en nuestra Casa de Hermandad hizo que se alcanzara una gran recaudación para este fin, pero lo más importante fue el conseguir unir a jóvenes y mayores, viejos y nuevos hermanos y en definitiva a los hermanos, en una inolvidable jornada de verdadera Hermandad.
Desde primeras horas de la tarde fueron llegando muchos hermanos con la comida y bebidas que se compartirían entre todos y a lo largo de la tarde los más jóvenes pudieron disfrutar de juegos y de esparcimiento en el patio de la Casa de Hermandad, donde también se ubicaron dos futbolines que hicieron las delicias de mayores y pequeños. Así mismo los miembros de la Juventud Hiniesta animaron el ambiente cantando y bailando sevillanas. Los más pequeños también pudieron disfrutar de una piñata que consiguió provocar una “disputa” por conseguir el mayor número de golosinas.
En actos como éste es donde los hermanos de la Hiniesta podemos demostrar la unidad y la fraternidad entre los miembros de esta institución. En actos como éste damos sentido a la palabra Hermandad. Agradecemos desde estas líneas a todos los hermanos que participaron en esta convivencia y os animamos a participar en próximas convocatorias y actos a desarrollar por la Hermandad.
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