Durante los días 12 al 15 de septiembre, Su Santidad el Papa Benedicto XVI, ha realizado un viaje apostólico a Lourdes (Francia), con motivo del ciento cincuenta aniversario de las apariciones de la Virgen a la joven Bernardette Soubirous. Este lugar se ha convertido en un gran centro de peregrinación mariológica por su importancia milagrosa, según lo atestiguan numerosos testimonios. En palabras del Papa, Lourdes es uno de los lugares que Dios ha elegido para reflejar un destello especial de su belleza, por ello la importancia aquí del símbolo de la luz. En una alocución directa a los jóvenes, el sucesor de Pedro indicó que no tengáis miedo de decir sí a las llamadas del Señor, cuando Él os invite a seguirlo. Responded generosamente al Señor. Este año 2008 es jubilar para Lourdes al conmemorar esta importante efeméride que supuso una transformación de este pequeño núcleo de población en los Pirineos franceses..
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