Hoy 25 de febrero, Miércoles de Ceniza empieza la Cuaresma, cuarenta días para un Domingo de Ramos Azul y Plata, cuarenta días para la conversión y para la reflexión sobre los misterios de la Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesúcristo, que concluirán con la gloriosa Resurrección y el comienzo del tiempo pascual..
El miércoles que precede al primer domingo de Cuaresma, los fieles cristianos inician con la imposición de la ceniza el tiempo establecido para la purificación del espíritu. Con este signo penitencial, que viene de la tradición bíblica y se ha mantenido hasta hoy en la costumbre de la Iglesia, se quiere significar la condición del hombre pecador, que confiesa externamente su culpa ante el Señor y expresa su voluntad interior de conversión, confiando en que el Señor se muestre compasivo con él. Con este mismo signo comienza el camino de conversión, que culminará con la celebración del sacramento de la Penitencia, en los días que preceden a la Pascua.
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El Miércoles de Ceniza recuerda a cada cristiano su situación de pecado y la necesidad de convertirse. Están invitados a practicar especialmente las limosnas, la oración y el ayuno. El tiempo de Cuaresma es un tiempo de conversión. También recuerda los cuarenta días que Jesús vivió en el desierto y su lucha contra las tentaciones.La Cuaresma incluye cinco domingos más el Domingo de Ramos y es un período de liturgia sobria. Se utiliza el color de ornamento morado, no se dice ni canta el Gloria y tampoco el Aleluya; no se ponen flores en el altar. La entrada triunfal de Jesús en Jerusalén se recuerda el Domingo de Ramos, primer día de la Semana Santa y de su Pasión.
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Su Santidad Benedicto XVI ha dado un mensaje con motivo de esta Cuaresma de 2009. Todo aquel que esté interesado en su contenido puede encontrarlo en el siguiente enlace: http://www.vatican.va/holy_father/benedict_xvi/messages/lent/documents/hf_ben-xvi_mes_20081211_lent-2009_sp.html
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1 comentario:
Gracias por el enlace al texto emitido por su Santidad, por el comentario y por el blog en general.
Ha comenzado un período de reflexión que nos va a permitir conocer mejor nuestro fundamento cristiano. Qué mejor manera que siguiendo los pasos que nos indican "ayuno, oración y limosna".
El ayuno, hay muchos tipos de ayunos, nos permitirá despejar nuestra mente y acercarnos aún más a aquellos necesitados a los que la oración y la limosna nos acercarán.
No olvidemos tener presente la palabra de Dios y consultar, disfrutar de los Evangelios en este período, en esos tiempos de oración. Aprenderemos de cada palabra, haciéndola siempre actual, entendiendo su interpretación en nuestro tiempo, pues su significado es eterno.
Un abrazo.
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