La convivencia humana
nos obliga a participar en esfuerzos comunes, y sin embargo vivimos unos
tiempos donde el desarrollo tecnológico y el materialismo anulan la dimensión
espiritual del ser humano, proporcionando modelos sociales que anulan e ignoran
al individuo.
En la actualidad
resulta prioritario que las actividades socio-caritativas estén presentes de
forma significativa y visible en la vida diaria de nuestras hermandades y que
esas actuaciones sean consistentes, perdurables y de calidad, adecuadas al
espíritu de compromiso Cristiano y a las nuevas exigencias.
Te proponemos que
colabores con nosotros en estas acciones con el propósito de promover la socialización
y la intervención comunitaria en la vida de la Hiniesta.
Una vida social comprometida
con el Evangelio permite defender y satisfacer muchos derechos del hombre y con
ello el desarrollo de una conciencia moral que nos haga más solidarios, más
abiertos a los demás, y en comunión con Dios.
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