En estos días
previos a la conmemoración de la venida de Jesús a Belén, días de reencuentros,
y celebraciones en familia, en la Hiniesta nos queremos acordar de todas las
personas y en particular de nuestros hermanos, devotos de nuestros Sagrados
Titulares y vecinos de San Julián, que en este tiempo de gozo sufren las
consecuencias de la crisis material, espiritual y social que padece nuestra
sociedad. De aquellos que se encuentran postrados por enfermedad en hospitales
y domicilios. Y de quienes sufren la ausencia de seres queridos.
La hermandad que
este año vive la Navidad con la nostalgia por la ausencia de nuestra Madre Dolorosa desea para todos
vosotros que la paz del Señor inunde vuestros hogares. Que la luz azul de Dios
os ilumine en el camino cierto de la Fe. Y que el Stmo. Cristo de la Buena
Muerte y la Stma. Virgen de la Hiniesta reconforten vuestros corazones y os colmen con
su gracia.
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